¿Qué es la hipertensión arterial?
Esta enfermedad consiste en tener unas cifras de presión arterial elevadas: la fuerza con la que circula la sangre en nuestro organismo (arterias) es demasiado "fuerte". Un ejemplo que suelo poner es el de un coche que circula por Pamplona con las revoluciones del motor demasiado altas.
Se define como una presión arterial sistólica ("la alta") mayor o igual a 140 mmHg (solemos utilizar la cifra 14 pero realmente es 140 mmHg) y / o una presión arterial diastólica ("la baja") mayor o igual a 90 mmHg.
El diagnóstico de hipertensión arterial se suele realizar en la consulta del médico: por lo menos dos mediciones de presión arterial elevadas. Además esta elevación de las cifras de presión arterial debe confirmarse en una segunda visita.
Rev Esp Cardiol. 2013;66(11):880.e1-880.e64
¿Es una enfermedad frecuente?
Alrededor del 30-45% de la población general padece hipertensión arterial. Este porcentaje aumenta significativamente con la edad.
En España, según la Sociedad Española de Hipertensión, hay más de 14 millones de hipertensos.
¿Qué síntomas provoca?
Es una enfermedad que no suele dar síntomas hasta que ha producido daño en órganos del cuerpo tan importantes como el corazón, las arterias, los ojos, el cerebro, los riñones...
Para entender porque inicialmente no suele dar síntomas, podemos pensar en el ejemplo del coche que circula por Pamplona con las revoluciones del motor demasiado altas. Al principio al coche no le pasará nada, pero a medio-largo plazo el motor, la inyección de gasolina y casi todas sus piezas se estropearan.
Por eso es importante medir la presión arterial de forma adecuada periódicamente, para poder tratarla aunque uno no note que la tiene elevada.
¿Cómo se trata?
El tratamiento suele consistir en tomar una o varias pastillas diariamente y en llevar a cabo una serie cambios en nuestro estilo de vida:
¡Siete consejos sencillos para mejorar el control de la hipertensión arterial!
1. Pierde peso: la hipertensión arterial esta claramente relacionada con el exceso de peso.
2. Haz ejercicio de forma regular: 30 minutos de ejercicio (pasear, hacer bicicleta, nadar o correr). ¡5-7 días a la semana pueden marcar la diferencia!
3. No fumes: con solo fumar un cigarrillo se produce un aumento brusco de la presión arterial y del ritmo cardíaco en nuestro cuerpo.
4. No tomes sal: el consumo de sal esta relacionado con un aumento en las cifras de presión arterial.
5. Haz una dieta rica en frutas y verduras: este tipo de alimentos además de mejorar el control de la presión arterial, nos ayudarán a mantener un peso adecuado.
6. Tómate la vida con tranquilidad: el estrés psíquico es malo para casi todo. Haz meditación y descansa adecuadamente.
7. Si bebes, hazlo con moderación: con uno o dos vasos de vino al día es suficiente.